The Rise And Fall Of The Bolchevique Superstar

Gente, no sean lentos. Cuando tengan una idea, háganla y paténtenla.

He sido superado por un niñito mexicano.

Abrí la revista Viva el otro día y leí, como si estuviera leyendo mi mente, mi idea de crear una ducha con un sistema que regule la temperatura del agua antes de abrirla para no gastar tanto líquido potable en esperar a conseguir el la medida perfecta.
Pero había dejado de ser mi idea y era la de un niño mexicano en una feria de ciencias en Estados Unidos.

Sí, está bien, quizás así realmente se concrete esa idea. Quizás si quedaba sólo en mi cabeza nunca se iba a materializar. Pero a uno le queda ese gustito amargo del "¡la pucha, pero a mí se me había ocurrido hace tiempo!".

En fin, ahora ya saben que no sólo Liniers tiene secuaces en el mundo que escuchan cualquier cosa que a uno se le ocurre para convertirlo en un chiste sino que pueden encontrarse también con un micrófono satelital en la profundidad de sus próximos tacos