The Rise And Fall Of The Bolchevique Superstar

El armado de las candidaturas presidenciales tiene propiedades similares. En un principio pensé que podía acudir al reservorio de frases hechas y decir: "se está desplegando el tablero y de a poco las fichas se van posicionando para enfrentarse en este sangriento encuentro". Nada de eso. No hay dos bandos que puedan atribuirse el negro y el blanco (o el rojo y el negro si de damas se trata). No hay tablero ya que no hay cuadros estables desde donde partir y andar, con movimientos estandarizados. Nuevamente, nada de eso encontramos en el costal de la política.

La harina ya tiene agua, quizás sal y levadura y cada referente político, fuerza o agrupación es un bollo en perpetuo y caótico movimiento. Grupos se separan y grupos se unen armando pedazos más grandes, una nueva masa que puede perder una partecita diferente a las partes originales de las cuales provenía. Esto deja un inevitable enchastre. ¿Podríamos decir que la política es un enchastre? ¿Hasta ello nos lleva la metáfora? No hay que desviarse del punto, hay que mantenerse en foco.

Hoy escuché que hay internas en octubre. El molde en el cual hay que poder meter esa masa. Por supuesto, para que entre en el molde no puede exceder su tamaño pero tampoco debería ser menos que él. Así que hasta octubre vamos a presenciar un show de bollitos uniéndose y desuniéndose en pos de alcanzar el tamaño necesario para dar la talla en el molde. Y es un margen muy estrecho sobre el que hay que amasar. No es la gran mesada de Martiniano Molina sino una infesta cocina del subsuelo del Congreso en el que se rozan los codos y donde, tras las rendijas, ratas y cucarachas juegan al fantasma de la ópera, dividiéndose ambas cámaras. La baja para las pequeñas pero eternas supervivientes, la alta para las gordas pestes. Pero dijimos que teníamos que enfocarnos.

Una brisa para el movimiento radical se respira en el aire. Hoy fue el aniversario de la muerte de Raúl Alfonsín y su hijo, Ricardo, lidera la encuesta realizada por Managment&Fit de imagen positiva a nivel nacional con un 52,8%, seguido por el vicepresidente Julio Cobos, con un 45,6%. Extraña situación la de Alfonsín que hereda el prestigio de su padre. Pero lo más extraño es que Alfonsín todavía no está ni cerca de presentarse como candidato a presidente. ¿Se unirá a Cobos, quizás como vice? ¿O apoyará al radicalismo tradicional con las posibles candidaturas de Ernesto Sanz y Gerardo Morales? Quizás decida ir él mismo por la presidencia y enchastrar todo un poco más (para no caer en la tentación de decir que patea el tablero). ¿Cobos se animaría a ir por la vicepresidencia OTRA VEZ? Lo puedo imaginar despertando todo sudado, como si hubiera termiando de correr una maratón en el infierno, gritando "¡no, otros cuatro años no!". Imposible.


Por supuesto, estamos dando por cierta una encuesta realizada a 1600 personas sobre un total de 40 millones de  habitantes... pero así es la estadística. Sólo importa que el número sea significativo y en una época supe cómo sacar ese cálculo, pero no más.
En la lista de opinión positiva sigue Francisco De Narváez, con un 41,3% y Carlos Reutemann, con 35,9%. Ambos son posibles bollos a unirse. Nuevamente, quién resignaría la presidencia en semejante alianza es impensable, aunque, claro está, a De Narváez se le podría complicar por su calidad de colombiano. Pero es impredecible. Reutemann podría perfectamente alinearse con Eduardo Duhalde, con Luis Juez o incluso, por qué no, con Carlos Menem, quien siempre puede robar algunos votitos aunque habría que ver si en la balanza no son más los votos que espanta. Pero con el Turco siempre fue una sorpresa todo.

Daniel Scioli, Mauricio Macri, Pino Solanas y Elisa Carrió siguen, en ese orden, en la lista. Scioli puede compartir una lista oficialista pero no sería extraño que el Gran Chef lo revolee por el aire y lo haga caer en la masa de Duhalde. Macri me parce que tiene muy poca presencia en el resto del país y lo mismo con Pino Solanas. Carrió, por otro lado, sólo resta votos a esta altura.

Por supuesto, en el ranking de imagen NEGATIVA de esta encuesta, quien está arriba es el ex presidente Néstor Kirchner, con un 51,6%. Le siguen Duhalde, Carrió y Macri. La presidencia de Cristina Fernández, dice la encuesta, es desaprobada con el 63,9%.
Uno puede ver el vasio medio lleno y decir que un 51,6% de imagen negativa sigue siendo un 48,4% de gente que quizás sí lo vote.
En fin, estos números no dicen nada aún y por ahora sólo sirven para divertirnos.

Más significativa es la última elección de Concejales en Mendoza en la que, si bien era de esperarse que ganara el radicalismo, alimentando su buen momento (en comparación, claro, con la casi inexistencia en la que se vio envuelto en los últimos años), no era de esperarse que el candidato K y el candidato de Macri no consigan ni una banca. Pobre Orly Terranova. Un año estás en la gloria del Rally Dakar, tocando el cielo, y al otro te estrellás contra el pavimento tras una mala jugada política. Una fecha para olvidar acompañado de un tinto. "Última noticia: el ex corredor Orly Terranova fue encontrado semi borracho y semi desnudo corriendo en los viñedos de una conocida finca al grito de '¡dunas, dunas, mi reino por una duna!'. Mauricio Macri expresó: '¡por última vez, no es mi hijo!'".


Pero para eso habrá que esperar. Ya divagamos demasiado. Más de lo que un lector de Internet puede soportar. Mientras el horno se calienta y cortamos los tomatitos, veremos qué tamaño y cuántas pizzas vamos a terminar haciendo.